La Big Band en su concierto de los paseos de San Francisco.
El festival de teatro y música Festeamus echó en la jornada de ayer el telón de cierre a lo grande, con el éxito del espectáculo teatral La Terapia definitiva, que vino a subrayar que el festival ha contado en esta edición con una mejor respuesta del público. Algo que se ha notado de manera especial en sus espectáculos de calle, como quedó demostrado con el concierto de la Big Band Theory, en los paseos de San Francisco, lo que supone una buena noticia para un certamen que va creciendo poco a poco y se ha abierto un hueco por méritos propios dentro del panorama cultural de la villa.
El festival empezó con uno de sus tradicionales pasacalles.
Se puede decir que Festeamus es un festival que tiene la calle ganada y esta edición nos ha traído todo un conciertazo, el del grupo de folk palentino El Naan, que a mas de uno le haría recordar los buenos tiempos del Folk Cuellar. Los de Palencia, con ese camino de ida y vuelta, demostraron que es posible esa fusión entre los ritmos mas tradicionales y otras músicas. Y esa mezcla entre la mas pura tradición, como demostró Maria Alba cantando una panadera, utilizando como instrumento de percusión una mesa de madera, y los ritmos latinos, funciona y combina a la perfección.
el grupo de folk palentino EL Naan, sobre el escenario del patio de armas.
Así lo entendió el público en el patio de armas del castillo, como también lo haría después otro público bien distinto en el concierto de Cheroot, en la iglesia de San Francisco, disfrutando del rock electrizante de los cuellaranos. Escenarios distintos y un público diferente, que pueden ser las señas de identidad de este festival. Y si a esto unimos su apuesta por el teatro, nos encontramos con un festival que se ha comsolidado en los veranos culturales de la villa, y que ya va por su quinta edición.
Los cuellaranos Cheroot en la iglesia de San Francisco.
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