Esta primera jornada del año se ha vuelto a repetir la tradición en Cuéllar de sacar en procesión la imagen del Niño Jesús, el Niño de la Bola, en procesión por las calles de la villa. Una tradición que se remonta en la villa de Cuéllar al siglo XVII, y que se ha mantenido hasta nuestros días gracias al entusiasmo de los hermanos de esta cofradía y a las numerosas personas que mantienen viva esta tradición. Mas de medio centenar de personas han acompañado la imagen en la primera de las procesiones por las calles del céntrico histórico de la villa.
La imagen del Niño de la Bola ha salido como es tradicional de la iglesia de San Miguel, acompañada del alcalde de la villa y otros miembros de la Corporación como mayordomos de esta edición, y a los sones de la dulzaina y tamboril de los Hermanos Ramos. Y desde la salida ha estado acompañada por una gran cantidad de danzantes, que no han parado de bailar a lo largo de todo el recorrido, hasta llegar a la iglesia de San Esteban, donde se ha danzado en honor al Niño de La Bola, a las puertas del templo. A continuación la procesión ha empezado su retorno hasta la iglesia de San Miguel, donde ha entrado ya casi de noche, por el entusiasmo de los danzantes que no han cesado de bailar a lo largo de todo el recorrido.
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