Cultivo de puerros en la comarca de Cuéllar.
La actividad agraria en la provincia de Segovia sigue en descenso, según los datos de cotizantes a la Seguridad Social, ya que la provincia ha terminado el 2014 con 3.329 profesionales registrados en el sector. Un dato que si bien representa un leve repunte con respecto al año anterior (3.275), refleja una tendencia claramente negativa, si miramos las estadísticas de los seis últimos años, que indican que 369 profesionales han dejado la actividad agraria y ganadera en la provincia.
Esta cifra pone de manifiesto, para la Unión de Campesinos, la tremenda crisis silenciosa que arrastra este colectivo en los últimos años, ya que partiendo de los datos de 2008, en estos últimos 7 años, la disminución de cotizantes ha sido casi del 10%, en el agro segoviano.
Y pone en evidencia, para esta organización agraria,»la necesidad de que las distintas Administraciones comiencen a tomarse en serio, la dramática situación que se vive en el sector agrario desde hace años. La Unión considera que ha llegado el momento, de que desde el Ministerio y la Junta «se lleve a cabo una verdadera política agraria a favor de los ATPs tendente a tratar de recuperar la renta de estos profesionales, porque opinan que «no es suficiente con la gestión de los fondos comunitarios».
En este sentido, consideran básico que «los ATPs tengan un tratamiento diferenciado, en positivo», cuando se proceda al reparto de los fondos comunitarios, pagos directos, ayudas desarrollo rural, etc, para asegurar el futuro a los agricultores y ganaderos. Porque desde la Unión de Campesinos se recuerda que «nadie debe olvidar que son los que están contribuyendo de una manera definitiva a asegurar la existencia de un medio rural activo, generando empleo, riqueza, fijando población, y en la conservación de el Medio Ambiente.
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