Editado Por Redacción Cuéllar en Jun 14, 2015

El nuevo alcalde de Cantalejo., Máximo San Macario, tras su toma de posesión en el despacho de la alcaldía.

La toma de posesión del nuevo alcalde de Cantalejo, Máximo San Macario,( PSOE) ponía ayer el punto final a casi  un cuarto de siglo de gobierno del Partido Popular en esta localidad, siempre de la mano del popular, José Antonio Sanz, que ha estado al frente  del concejo y gobierno de los cantalejanos desde el año 1991. Se abre así pues un nuevo ciclo en esta ciudad, que San Macario pretende marcar con «un cambio de talante» y de comunicación con los vecinos.

Esos cambios se empezaron a notar en la toma de posesión en la que el nuevo alcalde abrió sus palabras, primero, con un agradecimiento expreso a los cantalejanos por su participación en  las pasadas elecciones y de forma particular «a los 935 vecinos que confiaron en nuestro proyecto y que apostaron por un cambio, por construir un nuevo sendero, esperanzador e ilusionante para el futuro de nuestro pueblo».

Mas allá del acto formal de la sesión constitutiva, el verdadero reto de San Macario empieza a partir de ya de cara a configurar un nuevo proyecto de ciudad, en el que pretende afianzar el potencial de esta localidad como centro comarcal de la zona nordeste de la provincia. Una tarea en la que estará ayudado por su equipo de gobierno a los que expresó su agradecimiento personal por su labor, señalando que son «los verdaderos artífices que han hecho posible que este acto se desarrolle hoy aquí con estos protagonistas».

Y conocedor de la herencia que recibe, Maxi, como le conocen sus vecinos tuvo palabras de reconocimiento para el anterior alcalde, José Antonio Sanz, y concejales salientes, por su dedicación. Y lo hizo sin rubor al reconocer su labor: «Jose Antonio, aunque precisamente yo no sea el mayor valedor de tus políticas, ni apoye el desempeño del cargo público tanto tiempo, reconozco el mérito y el esfuerzo de 24 años de alcaldía, y personalmente, así lo manifiesto». Como debe ser. Estas palabras demuestran que San Macario, sabe que las formas son  importantes en todos los órdenes de la vida y hasta en las formas apuesta por  «un cambio tranquilo».