García de Cortazar en compañía del Duque de Alburquerque y la periodista Anne Bateson.
Parece que era ésta la pregunta que estaba respondiendo el profesor García de Cortázar a lo largo de su exposición y de sus respuestas ante más de cien alumnos de Bachillerato y otros tantos atentos asistentes. Era en la Iglesia de San Martín, dentro de las actividades del Hay Festival, por primera vez en Cuéllar.
En su tarea de reivindicar la presencia de las Humanidades en cualquier tipo de estudios, comenzaba parafraseando a Ortega y Gasset cuando escribía que los ingleses habían dominado el mundo con las Ciencias Clásicas y la Gimnasia, dos áreas que hoy no tienen precisamente mucho espacio en el curriculum. Entre ellas la Historia es la reina de las Humanidades, decía el historiador, que al tiempo se ha convertido en novelista con “Tu rostro en la marea”, ambientada hace un siglo, en la debacle de la I Guerra Mundial.
La tarea no es solo saber historia, sino saber comunicarla. Leyendo a Galdós se conoce mejor el S. XIX español que con un manual de historia. Pero hoy la novela histórica ya no es sólo entretenimiento, no busca solo recrear ambientes y personajes como la del S. XIX. Garcia Cortázar quiere que la historia no sólo cuente relatos sino que sirva para transformar el mundo. Con la historia se aprende que todo va cambiando y así se constituye en la herramienta que ayuda a interpretar y a adaptarse a los cambios que están ocurriendo tan vertiginosamente.
Siempre se ha utilizado la historia para la legitimación del poder, de cualquier color que sea. Los más interesados ahora son los nacionalistas que saben manipular la historia para leer y encontrar acontecimientos fundacionales donde no hubo nada. Cada uno ha utilizado y ha manipulado la historia como le ha interesado. Por eso, como antídoto, recomendaba el profesor Cortázar a todos los estudiantes, leer y visitar archivos.
El tiempo se hizo muy corto. Quedaron bastantes preguntas en boca de los alumnos. La primera llegada del Hay Festival a Cuéllar resultó muy atractiva, muy bien aprovechada y aplaudida por todos los asistentes. Un poco más para la próxima edición.
Jesús Eloy García Polo
La iglesia de San Martín en un momento de la charla de García de Cortazar.
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