La plataforma «Cega el río que nos une» ha alertado esta jornada de un fuerte olor y el tono blanquecino que presenta el arroyo Jaramiel, en el término de Iscar. El fenómeno que ha sido conocido a través de las redes sociales, parece que lleva sucediendo desde fechas atrás.
Miembros de la Plataforma han remontado el arroyo Jaramiel, pudiendo comprobar como el posible episodio de contaminación y/o eutrofización de las aguas, afecta a sus dos afluentes, Marieles y de la Sierpe, ya en el término de Chañe.
En el caso del Marieles señalan que «remonta hasta casi el pueblo, y en el caso de la Sierpe lo hace en todo su término municipal. Y además este último arroyo, aguas arriba adquiere «un tono rosado» debido presuntamente, según apuntan desde este colectivo, «al lavado de remolacha de mesa en Sanchonuño» .
Desde la Plataforma denuncian que «por desgracia la calidad del agua de los arroyos y lagunas del Carracillo sufren problemas de eutrofización debido a la alta carga de materia orgánica proveniente del lavado de hortalizas».
Por ello ante lo extraño del caso, así como para evitar males mayores, desde este colectivo ecologista se ha informado de la situación a la Confederación Hidrográfica del Duero a fin de que proceda a determinar la causa y corregirla.
8 noviembre, 2020
Lo que más sorprende es el desagradable olor que desprende el arroyo, nada bueno seguro. Además siguiendo el curso desde la Ctra de Arévalo se puede observar cómo se secan muchos pinos.