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Desde el mar de Pinares: ¿Llegaremos a tiempo?

Pinares de la Comunidad de Villa y Tierra de Cuéllar.

Acaba de publicarse el mayor informe sobre el cambio climático, el IPCC, también es el más duro y se muestra como la última llamada desesperada a los políticos, a la sociedad, a los votantes, a cada persona del planeta, para que efectuemos un cambio de 180 grados en nuestra forma de vivir, de consumir y de utilizar los recursos del planeta para conseguir una drástica reducción de la emisión de gases de efecto invernadero, causantes del presente y sobre todo del futuro calentamiento global.

¿Quién está dispuesto a sacrificarse para que podamos vislumbrar un futuro sin tantas sequías, olas de calor, inundaciones, hambrunas, migraciones obligadas, incendios devastadores…? Supongo que casi todos levantaríamos la mano si nos lo plantearan así de una manera abstracta y no comprometedora. Pero la realidad es muy diferente. Nadie, ningún político, quiere concretar los sacrificios necesarios para reducir las emisiones de CO2 y de metano.

Mientras tanto se siguen abriendo nuevas explotaciones petrolíferas y gasísticas, cada vez de mayor impacto ambiental en zonas incontaminadas del planeta. Se continúa con la construcción de oleoductos, como el más reciente que traerá a Alemania el gas del norte ruso o el tan cuestionado en Norteamérica. Se mantiene la explotación intensa de carbón en países como Australia, India, China y USA. En nuestra propia casa se plantea la salvajada de las ampliaciones de los aeropuertos de Madrid y Barcelona, cuando está constatado que el transporte aéreo es el que más contamina, favorecido por los bajos precios, las subvenciones y la nula repercusión de los costes ambientales. Con este panorama, ¿quién se va a atrever a pedirnos que sacrifiquemos nuestro bienestar particular por las generaciones futuras?

Los políticos que han intentado introducir alguna medida, aunque mínima, contra el cambio climático han sido derrotados. Recuerdo dos pequeños hechos significativos. 

1.La anterior alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, había iniciado una serie de actuaciones y normativas para limitar y reducir el uso del coche privado, el gran contaminante de las ciudades. Fue derrotada en las urnas y su sucesor se muestra orgulloso de haber acabado con el plan Madrid Central, que proponía seguir el camino de todas las capitales europeas en la reducción del tráfico urbano contaminante.

2.El pasado 13 de junio los suizos votaron en referéndum (como casi todo) una Ley de Cambio Climático. Incluía diferentes medidas que afectaban desde la limitación de pesticidas hasta el aumento de los precios de gasolina y diesel…nada del otro mundo. La votación fue negativa. Los suizos no quieren ver reducido su confortable nivel de vida a favor de la supuesta supervivencia de las generaciones futuras. 

Son dos notas puntuales de lo que nos traerá nuestra sociedad occidental, con una democracia acomodada y derrochadora de los recursos del planeta, que son de todos.

No hay planeta B.

Vemos que los políticos se reúnen para hablar del cambio climático, hacen declaraciones, incluso firman acuerdos … para construir un marco previo que favorezca estudios y proyectos que cristalicen en unas medidas que se  sustancien en las bases para implementar unos……¿Nos suena esta palabrería? Siempre se expresan dentro de una ambigüedad extrema porque si un político habla claro sabe bien que no lo vamos a votar.

Pensando como un ciudadano medio, con una vida tranquila y medianamente confortable en un país del primer mundo: ¿Votaría yo a alguien que me dice que me va a subir el precio del gasoil, de la electricidad (más todavía), del agua del grifo, que va a restringir mi libertad de movimiento con mi coche, que va a limitar y encarecer el uso de aviones para el turismo, que va a poner tasas y a encarecer todos los envases de plástico…? ¿Votaría a alguien que hable de decrecimiento, que quiere decir empobrecimiento material, tal como hoy lo entendemos? 

Está claro que con un programa así ningún político va a ser elegido. Preferimos que nos entretengan con cuentos de libertad, de la patria, de la tradición y que nos digan que la ciencia encontrará soluciones, mientras nosotros continuamos derechos al precipicio. A cada político le decimos “miénteme, dime que todo esto se arreglará sin problemas”. A esto se le llama Populismo. Va en aumento y terminará por dominar la política del primer mundo. No aporta soluciones, pero tranquiliza, sobre todo a las clases favorecidas y a las grandes fortunas que manejan los controles sociales por medio de unos medios de comunicación que ofrecen muchos ítems informativos, montañas de datos confusos para enmascarar los análisis y las advertencias de los científicos.

Esos mismos poderosos cada vez se refugian más en sus búnkeres, aislados y protegidos como nuevos señores feudales que dominan desde sus castillos sin necesidad de explicaciones. Apenas les afecta el cambio climático, incluso nos hablan de las ventajas que nos puede traer.  Por el contrario, los grandes sufridores del calentamiento global están siendo y serán los países que no lo han provocado.

 Las soluciones particulares o nacionales ya no existen mientras los grandes contaminadores continúen con su modelo de negocio. Según un manifiesto publicado en abril por varios premios nobel “ el futuro de la humanidad depende de la capacidad de tomar decisiones colectivas a largo plazo”. Mientras no consigamos una gobernanza global seguiremos caminando hacia el abismo. Ya no sirve que yo consuma menos agua al ducharme, que recicle mis plásticos, que vaya en bicicleta por la calle… Ya es demasiado tarde. Las medidas deben ser radicales y globales. 

Los políticos no buscan solucionar los problemas a largo plazo, solo quieren salir elegidos o reelegidos. A cualquier precio. Pueden mentir, ocultar datos, contar cuentos…que los votaremos más aún. Eso es el populismo. Nuestras democracias no están preparadas para enfrentar estos desafíos. Deben cambiar profundamente para afrontar esta amenaza global y definitiva porque hasta ahora todas las grandes crisis han terminado en grandes guerras. Dice Ed Wilson que “ tenemos cerebros paleolíticos, instituciones medievales y tecnologías de la era espacial”. Desde el Paleolítico hemos intentado solucionar casi todas las crisis y conflictos mediante la violencia. Nuestro cerebro no ha evolucionado. Podemos echar una mirada al mapa mundial. La ONU es un teatrillo multicolor para  que luzcan los políticos su palabrería en desfiles anuales. Nunca ha solucionado un conflicto, simplemente hace caridad y pone parches.

Los científicos ya saben que no les vamos a hacer caso, que seguiremos bailando mientras suene la música de la orquesta del Titanic.

Autor: Jesús Eloy García Polo

Muévelo

3 Comentarios

  1. A la pregunta de si alguien votaría a quien me va a subir el precio del gasoil,de la electricidad,del agua del grifo,de los envases de plástico etc etc..contesto rotundamente que SÍ.La prueba la tiene en nuestra querida España.Por cierto y hablando del recibo de la luz,¿para cuando una manifestación convocada por Unidas-Podemos para mostrar nuestro rechazo?¿O es que ahora gobiernan los suyos?Terminarán diciendo que gracias a ellos no encendemos el aire acondicionado,ni usamos el coche y así no contaminamos.Que país.

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  2. El gobierno actual aprovechará esté filon para colarnos todo tipo de nuevos impuestos.
    ¿Servirán para luchar por el cambio climatico o para mejorar los servicios públicos?.
    No.tan solo para engordar aun mas el inmenso pesebre en que se ha convertido el estado.

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  3. Pijoprogres de Europa, vamos a salvar el mundo!!

    Destruiremos toda la industria que contamine y la que no contamine también por si acaso, destruiremos agricultura y ganadería que son lo más contaminantes del mundo.

    Eso si, luego importaremos todo de Asia sin importarnos un pimiento lo que allí se contamine para producirlos e importaremos alimentos (tenemos la mala costumbre de comer 3 veces al día)
    de América del Sur África o Asia sin importarnos como sean producidos ni en materia de contaminación ni de seguridad alimentaria ni de bienestar animal,…

    Pero vamos a salvar elmundo…..

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