Editado Por Redacción Cuéllar en Abr 26, 2015

Ana Rodriguez nos desvela la personalidad y la poesía de Alfonsa de la Torre.

Este montaje teatral de Poeta Bululú  ha sido la segunda de las representaciones dedicadas a la figura de Alfonsa de la Torre, una propuesta bien distinta a la de Festeamus,  pero no menos interesante ya que en esta obra Ana Rodriguez, en el papel de Eva, entabla un diálogo imaginario con la figura de la poeta cuellarana, para darnos a conocer su vida y obra. Dos representaciones radicalmente diferentes pero con un fin compartido, descubrir a Alfonsa de la Torre.

De forma que este monólogo nos descubre su personalidad, a través de la narración de un relato que repasa su vida, sus relaciones, sus viajes y su retiro en La Charca rodeada de pinares. Y a la vez que plantea muchos interrogantes, en cada paso, nos desvela su poesía. Lo realiza Eva, la protagonista, rescatando sus poemas de un baúl, unos textos que desvelan la personalidad de Alfonsa, y la mística de su poesía…

El monólogo es ágil, y mantiene el interés de los espectadores en todo momento. Lo que quiere decir que la cosa funciona, y que este relato íntimo no hace conocer mejor a Alondra.. su mundo interior, y por qué se aísla del mundo para vivir en una finca, rodeada de sus recuerdos, de sus libros….y del universo de sensaciones que describe en sus poemas.

De tal forma, que la finca de La Charca, ese retiro bucólico de Alfonsa de la Torre y el entorno que rodea a este paraje, ahora radicalmente cambiado por la proximidad de la autovía, se ha convertido en un lugar ahora mas hermoso, después de estas dos representaciones en homenaje a Alfonsa de la Torre. Alfonsa, una mujer que como relata en uno de sus poemas creía ser Alondra, pero que sabía que se llamaba Alfonsa. Esa mujer desconocida…ahora lo es un poco menos.