La Huercasa Country All Stars Band sobre el escenario.
Artículo de opinión de Jesús Eloy García Polo
Después de disfrutar en Riaza del Huercasa Country Festival. Se me ha quedado en el paladar un regusto fuerte de “endivia” sana. El éxito ha sido total, con una extensa repercusión a nivel nacional y con el sentimiento de ser ya un evento musical consolidado. Pregunté, como el año pasado por qué no se había planteado hacer este Festival en Cuéllar. La respuesta volvía a hablar de la falta de infraestructuras en general y de hoteleras en particular, como la causa de que Cuéllar no pudiera acoger un festival de esta envergadura.
Triste realidad que lleva otra vez a pensar en la decadencia de Cuéllar como núcleo urbano, como cabecera de comarca y como municipio que pueda aportar algo al panorama de Castilla y León.
Hace tiempo que diferentes industrias comenzaron a establecerse en Sanchonuño, tanto agroalimentarias, como madereras o de otro tipo. Mientras tanto, Cuéllar ha visto declinar o desaparecer su escaso tejido industrial. Ahora vemos cómo salen cada día más trabajadores de Cuéllar a su puesto de trabajo en Sanchonuño o en otras poblaciones del Carracillo. Unos son cuellaranos de toda la vida, otros son inmigrantes afincados en Cuéllar que acuden diariamente a su trabajo en las tierras o las industrias del Carracillo.
Huercasa Country Festival de Riaza.
Hay que admirar el buen hacer de quienes en 20 años han convertido unos pequeños pueblos castellanos en un ejemplo de revitalización económica en el mundo rural. Las circunstancias han sido favorables, por supuesto, pero hay que saber aprovecharlas y hay que contar con emprendedores que se inventen negocios de la nada, para llegar a hacer muy rentables unas humildes lechugas.
¿Qué ha ocurrido en Cuéllar mientras tanto? ¿Por qué han decaído aquí las industrias relacionadas con la madera? ¿Por qué no han surgido nuevos focos de empleo? ¿Por qué ha decaído la hostelería y el comercio, que también eran un pilar básico para el empleo? ¿Por qué Cuéllar apenas se beneficia del boom económico del sector agroalimentario de los pueblos de alrededor? ¿Por qué solamente Mercadona sabe captar clientes en un pueblo que debería funcionar como cabecera comarcal para todo tipo de bienes y servicios?Son preguntas que me hago en una tarde de canícula veraniega.
Sentí en Riaza una “endivia” sana, pero con un retrogusto amargo, como tienen las buenas endivias. Alguien debería haber hecho todo lo posible para que el Huercasa Country Festival no hubiera necesitado salir de Cuéllar. Al final, me quedo con el consuelo de cada día: siempre nos quedarán los Encierros y las Procesiones.
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