Los encierros de Cuéllar, con cinco encastes diferentes

Editado Por Redacción Cuéllar en Ago 11, 2015

Ejemplar del hierro de Los Bayones.

En esa cuenta atrás para el comienzo de las fiestas de los encierros de Cuéllar, en el apartado organizativo se van cumpliendo las pautas y hay que señalar que las reses de las diferentes ganaderías que se van a encerrar del 30 de agosto al 3 de septiembre están, desde hace unas fechas, bajo la tutela del ganadero y director de los encierros de Cuéllar, Pedro Caminero.  En concreto la última de las ganaderías contratadas, la de los Bayones,  ya se encuentras desde el pasado día 6 de agosto en la finca del ganadero palentino, y de esta forma se cumple una de las premisas que se consideran fundamentales de cara a tener mas garantías para un normal desarrollo de los encierros.

Otra cosa será, después, lo que suceda en el desarrollo del encierro por el campo, que como todo manejo con ganado bravo es imprevisible, pero las reses de estos cinco hierros y ganaderías que se van a correr en los encierros tradicionales de Cuéllar, es decir, Manuel Blazquez , El Canario, Coquilla de Sanchez Arjona, Los Bayones y Guadajira, ya se encuentran, desde hace unas fechas, en manos de los encerradores, José Luis Mayoral y Pedro Caminero, de cara a facilitar su manejo en el campo.

Con la  particularidad este año, de que se trata de cinco encastes diferentes, Nuñez, Murube, Coquilla, Atanasio y Domecq, con lo que los encierros  «a priori» ganan  en algo tan esencial como la diversidad. Y por lo tanto, en los encierros de  Cuéllar no va a haber «monoencaste», aunque, lo de la casta, se verá mas tarde en el comportamiento de las reses, y ahí hay que contar otros muchos factores, que servirán de análisis, una vez visto el juego de los toros y novillos de estas cinco ganaderías, en el transcurso de los encierros.

Encierro de la ganadería de El Canario.

Y en ese aspecto, hay que señalar que de los cinco ganaderías seleccionadas, se cuenta con el bagaje de conocer,( aunque repetimos el toro es imprevisible), que las reses de Manuel Blazquez  y Coquilla han sido manejables en el campo con los caballos, y un factor si cabe aún mas importante, varios de sus ejemplares luego han dado un juego extraordinario en los festejos de plaza. De los Murubes se espera también que sean manejables por los caballos, y está por ver cómo se  comportan los de los Bayones, y los de procedencia Domecq, pero eso forma parte de esa «incertidumbre» que suponen los encierros de Cuéllar, aunque en el 2013 una novillada de Los Bayones resultó muy complicada por el campo. Y todo esto viene a cuento de que los  toros están siendo encabestrados.