El verano cultural de la villa de Cuéllar ha comenzado este fin de semana con un Festival de Jotas y Danzas infantil, que ha venido a demostrar que el folklore popular va ganando terreno y entre los mas pequeños también late la afición por los bailes y danzas desde pequeñitos. Este festival reunió sobre el escenario de la iglesia de San Francisco a la agrupación de Danzas Besana, de Valladolid, los burgaleses del grupo de Danzas Rauda, de Roa y la agrupación de Danzas Villa de Cuéllar, y los peques de estas formaciones levantaron al público de sus asientos por sus buenas maneras como danzantes.
El festival, que ha sido una iniciativa de la agrupación de danzas cuellarana, ha sido todo un éxito porque es una excelente plataforma para contemplar las ganas e ilusión que ponen los peques desde tan temprana edad a dar sus primeros pasos y arrancarse a bailar. Así lo demostraron sobre el escenario los pequeños y pequeñas danzantes que encandilaron al público con los bailes de la Jerigonza, del Pañuelo, y por parte de los pequeños de la villa, a la hora de ponerse el «pañuelo rojo al cuello» y arrancarse a bailar la jota de Cuéllar. Así, desde bien pequeñitos, se hace cantera.
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