Usted debe 21.501, 788 euros y los va a pagar
Esta es la cifra exacta que debemos cada uno de los 46.507.760 españoles que habitamos este país en 2014. Se lo debemos, y se lo pagaremos, a esos señores que llaman “Los Mercados”. Hemos llegado al billón de euros de deuda pública, que es el cien por cien de nuestro PIB, es decir, de todo lo que producimos y ganamos en un año.
Hace cuatro años la cifra era del sesenta por ciento, pero se han ido incrementado nuestras deudas tapando los agujeros de Bancos y Cajas de Ahorros. Ahora que llegamos al cien por cien nos dicen que ya estamos saliendo de la crisis. Probablemente nosotros no podremos pagar esa barbaridad, pero no hay ningún problema. Nos lo alargarán en cómodos plazos para asegurar la felicidad duradera de los señores de “Los Mercados” y lo continuarán pagando nuestros hijos, con esos sueldos de mierda que les están ofreciendo. Hay que recordar que el Gobierno de Merkel ha terminado de pagar ahora las deudas alemanas de la II Guerra Mundial. Las funerarias nunca tienen prisa.
En ese billón de euros están contenidas todas las “alegrías” de nuestros políticos y banqueros. Ahí están los sangrantes despidos y pensiones que se autoconcedieron los políticos de las Cajas de Ahorro con nuestro dinero. Ahí están los aeropuertos que no tienen aviones, como los de Ciudad Real o Castellón, los que siembran números rojos cada día, como León, Lérida, Murcia… Ahí están los AVEs infrautilizados, las autovías vacías, como la del Camino de Santiago León-Burgos. Pero también están Palacios de Congresos sin congresos, Museos y Centros de Interpretación sin ningún interés. Ahí está el apaño con La Faisanera, convertida en Palacio de Congresos. Ahí están nuestras Tenerías, que no era lo que Cuéllar necesitaba y que se han llevado 750.000 euros de todos, aunque el Alcalde diga que al Ayuntamiento no le ha costado un duro. El dinero público es de todos y lo pagamos todos, venga de donde venga. También estamos pagando nosotros los desmanes de los políticos de Valencia en sus Cajas.
Parece que nos quedan muy lejos estas macrocifras, pero cada año las vemos desglosadas, euro a euro, en todos los recortes que estamos sufriendo. Si no fuera por ese billón de euros que debemos tendríamos un Centro de Salud nuevo, con especialidades, tendríamos más médicos y mejor servicio de ambulancias, en el Colegio de la Villa tendrían un Gimnasio, los Centros Educativos no estarían faltos de profesores con aulas más llenas cada curso. Habría una guardería pública. No habría copago en las medicinas, ni pago completo en libros texto. Habría dinero para música y teatro… No sería el paraíso, sería un mundo normal si no nos hubieran engañado.
Así se concreta en la vida de cada día esa deuda del billón de euros en la que otros nos metieron, sin pedirnos permiso. Parece ser que no necesitaban nuestro aval. Los votantes no somos nadie. Simplemente cada uno de nosotros seremos un puntual pagador de veintiunmil quinientos un euros con setecientos ochenta y ocho céntimos. Pagaremos, nosotros y nuestros hijos, hasta el último céntimo, porque dicen que plantear una condonación de la deuda sería situarnos como un país poco de fiar e insolvente. Pero ¿qué ocurriría si lo hiciéramos unidos con Grecia, Italia, Portugal, Irlanda, Eslovenia… y todos a los que nos engañaron dando dinero sin medida ni control a nuestros políticos corruptos?
Opinión: Jesús Eloy García Polo
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