El efecto llamada de la asociación de Amigos del Caballo de Nava ha tenido unos efectos mas que positivos para los encierros naveros, y mas de cuatrocientos caballistas de dieron cita este sábado en La Nava en el segundo de los encierros por el campo, y eso se notó mas tarde en el ambiente en las calles y en los bares de Nava de la Asunción, que vive este fin de semana la recta final de sus fiestas a todo pulmón. Luego, en el encierro las cosas fueron calcadas al primero de los encierros, con la manada dividida en cuatro grupos, y por tanto, se realizaron sucesivamente cuatro entradas para encerrar en las calles de la localidad.
El encierro fue muy rápido desde la salida del paraje de Las Ordas, con dos novillos que encabezaron la marcha, que no frenaron hasta su llegada a las calles, y un tercero un poco mas retrasado, que entraba minutos mas tarde, arropado también por un gran número de caballos. Estos entraron envueltos en una nube inmensa de polvo y caballistas, hasta tal punto que no se distinguía los novillos entre los caballos. Después entraba un novillo colorado, que éste si dio bastantes sustos entre los espectadores al salirse de la zona vallada en la zona en el embudo, y que fue finalmente encerrado a base de mucha exposición por los caballistas, entre los coches y el público. Y, por último, hacía su entrada en la calles el que cerraba la manada, sin mas complicaciones.
Los encierros de la Nava finalizan esta jornada con el último encierro por las calles, y se puede decir que salvo los percances de los caballistas en el primero de los encierros por el campo, las cosas han funcionado bien porque se han conseguido encerrar casi todas las reses, ya que solo un novillo tuvo que ser anestesiado. Y ojo al dato nunca antes se han dado cita tantos caballistas en los encierros naveros.
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