Imagen de la ladera próxima a la torre de San Nicolás.
La Confederación Hidrográfica del Duero ha comenado esta semana las labores de reconocimiento del talud situado en la margen izquierda del río Eresma, a su paso por la localidad de Coca, para determinar las causas del deslizamiento de la ladera. Se trata de unos trabajos de diagnóstico, encaminados a conocer la estabilidad del terreno en esa zona que se desarrollarán en dos fases. La primera de ellas mediante diferentes sondeos y pruebas serán efectuados por la empresa Eptisa y se prolongarán por espacio de 3 semanas y tendrán un coste aproximado de 28.500 euros.
La segunda parte la desarrollará el Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX), organismo que depende de los Ministerios de Fomento y de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, que llevará a cabo el estudio geotécnico y el informe final para determinar las posibles soluciones. Este estudio se espera que esté terminado para finales del presente año 2017 de manera que se obtendrá un correcto diagnóstico de las causas de los deslizamientos de la ladera, así como una propuesta de las medidas correctoras que sería preciso ejecutar para evitar el fenómeno.
Por otro lado continua la campaña de recogida de firmas iniciada en esta localidad que reclaman una actuación urgente para evitar la caída de la torre de San Nicolás, que se ve amenazada por el derrumbe de la ladera del Eresma. La campaña lleva recogidas un millar de firmas, a través de la plataforma change.org, pidiendo a las Administraciones, Junta de Castilla y León, Confederación Hidrográfica del Duero, Patrimonio y ayuntamiento de Coca que «no dejen caer la torre de San Nicolás».
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