Corderos lechales en una explotación ganadera.
La organización agraria ASAJA considera este mes de Diciembre como crítico para los ganaderos de ovino, y por ello pide a las distintas administraciones que «intensifiquen, en estas fechas, los controles sobre las importaciones de cordero«, principalmente francés, por la repercusión negativa que tiene para los productores de lechazo de nuestra Comunidad.
Esta organización ha comprobado, que las mayores importaciones de lechazo se producen en este mes, con un único objetivo de «presionar a los ganaderos de ovino de la región» y «obligarles a vender sus lechazos a precios por debajo de coste», una bajada de precios que señalan «ni tan siquiera beneficia al consumidor, ya que los beneficios se quedan en la cadena de distribución».
Además consideran, que se deriva «una confusión maliciosa» a los consumidores al etiquetar estos lechazos, como sacrificados en Castilla y León, y en este sentido desde ASAJA se exige a la Administración, que estos productos importados de fuera: «tengan un etiquetado claro y bien visible» de su procedencia y que «no se enmascare al cordero importado como si fuera lechazo de nuestra tierra».
Hay que recordar que es en estas fechas, cuando tradicionalmente los ganaderos de ovino» dan salida a buena parte de sus lechazos», por lo que «de cómo se valore el producto en estas fechas, depende buena parte sus ingresos anuales«. Y por ello desde ASAJA se pide a los ciudadanos, que «pidan lechazo de la región» un producto de máxima calidad, ya que con su consumo «se refuerza la economía de muchas familias y el progreso del medio rural de nuestra Comunidad».
Fuente: ASAJA Castilla y León
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