Muy pocos corredores
El último encierro de San Frutos en Aguilafuente dejó a todo el mundo congelado por el bajón en las temperaturas. Con el termómetro bajo cero y el suelo resbaladizo fueron muy pocos los que se atrevieron a correr delante de los novillos del Taru, que bajaron y subieron 4 veces hasta los corrales del matadero, (hubo quien estuvo fuera de lugar poniendo una valla para parar la manada). Pero hacía falta valor para ponerse delante y mucho aguante por parte del público, que tiritaba de frío al pié de las talanqueras.
Al filo de la medianoche la temperatura rozaba los 0ºC , y la sensación térmica muy por debajo de esa temperatura. Y así las cosas, el público recurrió incluso a mantas para protegerse del frío en la plaza de toros, y en la plaza del pueblo los de la orquesta Pikante combatían el frío con prendas de abrigo, aunque luego calentaron el ambiente hasta la madrugada.
A pesar del frío, el público que casi llenaba la plaza de toros, pitó porque no se celebró la capea posterior el encierro, y así terminaba el último de los encierros de la temporada en la tierra de Pinares. Afortunadamente en este segundo encierro no hubo ningún percance.
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