Un semana de crudo invierno y los hielos están comenzando a pasar factura a muchos edificios del casco urbano de Cuéllar, sobre todo en el casco histórico, donde a las duras condiciones invernales se une el mal estado de muchas fachadas e inmuebles, que en algunos casos amenazan ruina.
Esto hace que, en distintos puntos del casco urbano haya que tener precaución, por los desprendimientos de fachadas y tejados del caserío del casco antiguo, como se puede comprobar en la Magdalena, donde la pared del edificio contiguo al albergue municipal amenaza con caerse, y en otros puntos críticos, como la Excadena, donde una de las paredes de un inmueble también tiene desprendimientos.
A esta situación hay que añadir, la de edificios situados en el mismo centro del casco urbano de la villa, como por ejemplo, en la céntrica calle Chorretones, donde un tramo de la calle se ha vallado por el riesgo de desprendimientos del tejado de uno de los inmuebles.
Una situación que obliga a revisar el mal estado de muchos edificios del caserío del casco urbano, que de forma mas o menos acusada pueden estar en las mismas circunstancias. Lo que hace necesario una inspección técnica por parte de los servicios municipales, para evitar riesgos.
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