Uno de los sectores mas afectado por la caída de los precios, el de las hortalizas.
El dato de la pérdida de la renta agraria, que finalmente ha caído un 7.5%, viene a confirmar el catastrófico año que ha vivido el sector agrario, en la pasada campaña, y ha movido a las organizaciones agrarias a solicitar al Ministerio de Agricultura, como primera medida, reducciones fiscales para algunos cultivos, que sufrieron a lo largo del pasado año graves pérdidas provocadas por la sequía, la crisis de precios por el veto ruso, incrementos de los costes de producción o la caída drástica de los precios.
Así lo va a realizar la Unión de Campesinos, en una reunión que va a mantener con el subsecretario de Agricultura, en la que va a solicitar la bajada de los módulos en los sectores mas castigados. Según los datos del propio Ministerio, la caída del valor de la producción en 2014 ha sido especialmente importante en sectores como la patata (-45,5%), los cereales (-20,1 %) y las frutas (-9,5) y hortalizas (-6,2%).
Y esto hace que para muchos agricultores, según la Unión de Campesinos, las inversiones y gastos para seguir manteniendo su actividad económica se hagan inasumibles y. por tanto, consideran necesaria una adecuación de los índices de rendimiento neto de las actividades agrarias, a la realidad económica del sector en el ejercicio 2014.
Estos resultados ponen además de manifiesto, para esta organización, el limitado alcance de algunas de las medidas adoptadas a lo largo del año. Como por ejemplo, las ayudas para paliar los efectos de la sequía se han limitado a financiar el coste de un año de carencia de los préstamos a los planes de mejora y modernización o para ganaderos de extensivo y apicultores de algunas provincias.
Y por otra parte, en relación con los problemas derivados del veto ruso, señalan que muchos productores se quedaron fuera del acceso a las ayudas, al publicarse demasiado tarde las ayudas. Y los productores de otros cultivos, pese a tener ayudas, sólo les han servido para sufragar los gastos de recolección y transporte. Por ejemplo, el porcino, muy afectados por el veto ruso, se han quedado definitivamente sin ayudas compensatorias, y deberían ver reducido su módulo a las circunstancias actuales.
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