En declaraciones a acueducto2, Juan Francisco Cárdaba, gerente de Agrogestión Ambiental, la planta de compostaje acusada por la plataforma No Más Mierda de estar en el centro tanto de la contaminación del aire y del suelo de la localidad como de los actos vandálicos acaecidos contra miembros de la plataforma, apunta a montajes de la propia plataforma como razones explicativas de las pintadas o a la aparición de residuos no orgánicos en los acopios de compost. Asimismo, Cárdaba defiende la licitud de la actividad en su empresa sobre la que se hna sustancializado malas prácticas de buena parte del sector porcino de la comarca.
“Yo puedo ser el responsable de una parte del olor en noviembre, en diciembre, en enero… ¿pero en febrero, en marzo, en abril, el resto del año? ¿También yo? En Fuentepelayo hay explotaciones que dicen tener cien cerdos y hay quinientos o más, ¿dónde va ese purín? Hay granjas prácticamente pegadas al núcleo urbano, y no a dos kilómetros como nuestra planta. Nosotros hemos encargado y pagado un mapa de olores, allí se ve claro el origen de ese olor”. Eso por no hablar de “las plantas de pienso del pueblo, que también huelen, pero como eso da mucho empleo…”, explica Cárdaba.
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