De Hontalbilla a la Antártida. El militar segoviano, David Merino, ha comenzado a vivir en estas fechas su experiencia antártica, como integrante de la campaña del Ejército de Tierra, en la que se van a llevar a cabo distintos proyectos de investigación enmarcados en el Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica.
Se trata de una misión en la que el sargento del Regimiento Nº 11 de Ingenieros de Salamanca, prestará apoyo a los científicos españoles para que puedan realizar sus proyectos de investigación y junto a sus compañeros se encargarán de proporcionar los medios logísticos sobre el terreno.
La base española está situada en la isla Decepción y la misión de los componentes del REI nª 11 es la de mejorar las infraestructuras de la base, ampliando las mismas y reforzar las ya existentes, como la de reforzar la playa para evitar los daños que causan los temporales, y diversos trabajos para la instalación de un nuevo módulo para los equipos de investigación.
Merino afirma que «el viaje ha sido muy largo. Primero en avión hasta Punta Arenas, con escala previa en Santiago de Chile, para llegar después de 4 días de navegación a la base Gabriel de Castilla situada en la bahía de esta isla volcánica» .
El frío no asusta al segoviano y además de su labor profesional está viviendo una auténtica aventura en la que nos cuenta en sus primeras impresiones que «el clima es sorprendente, ya que cuando vas a la Antártida la gente piensa en hielo, frío, temperaturas bajo cero,…. pero al final estamos en el verano Antártico y las temperaturas son muy llevaderas».
«A parte del trabajo, que es lo primero y a lo que venimos, también hay tiempo para poder conocer la isla y quedarnos asombrados de lo maravilloso que puede llegar a ser este lugar » subraya Merino, que ha llevado una enseña de Hontalbilla hasta el continente helado.
Base española Gabriel de Castilla.
La campaña tendrá una duración aproximada de tres meses y en sus primeras incursiones por la isla ha tenido oportunidad de visitar la bahía de Balleneros, lugar donde los ingleses se dedicaban a la caza de ballenas para la extracción de aceite, y las ruinas de una antigua base chilena, abandonada durante la erupción del volcán. En la isla ademas de la Base española, Gabriel de Castilla, se encuentra también enclavada la base argentina «Decepción».
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