Lo que se podría denominar «efecto Edades» ha generado cuatro nuevos negocios en la villa de Cuéllar: 2 establecimientos dedicados a la venta de Vinos y Productos artesanales y dos negocios de hostelería. Todos ellos ubicados en el casco antiguo, y que buscan esa “oportunidad de negocio” aprovechando la gran afluencia de visitantes que se espera a la exposición. Y en esto no hay dudas, ya que cada una de las citas de las Edades del Hombre ha supuesto un indudable éxito de público, alcanzando en la última edición de Toro la cifra de 240.000 visitantes.
De esos cuatro negocios, uno de ellos se trata de la empresa de productos típicos y artesanos Auténticos CyL, de Coca, que se ha emplazado junto a la iglesia de San Martín, y que como su propio nombre indica vende productos de la tierra, desde los ladrillos mudéjares de la villa, miel de la Infanta hasta todo tipo de vinos, dulces, conservas y pastas de la región. Y como dato curioso hay que destacar que tiene a la venta un vermut, que lleva el nombre de Cuéllar.
El segundo de los negocios está igualmente muy bien situado junto a la iglesia de San Esteban, y se trata en este caso de una empresa local, que tiene como oferta esencial los vinos de su bodega Malaparte. Y en los dos casos restantes se trata de la reapertura de dos negocios de hostelería, el restaurante Rincón Castellano, en la plaza Mayor, y La Cúpula de San Pedro, que se encontraban cerrados y que vuelven a abrir sus puertas con nuevos propietarios.
Se trata como indicamos de lo que se puede denominar como «efecto Edades», que pretende aprovechar el empujón económico que se espera de la afluencia de visitantes a la exposición. Junto a estos negocios, hay que señalar que la localidad y la comarca cuentan con una amplia oferta hostelera y de servicios, que van a ser los sectores que mas se van a beneficiar de este evento cultural, que a su vez genera riqueza en cada una de las localidades que visita la exposición.
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