La villa de Olmedo celebró la fiesta de su patrón San Miguel con el tradicional toro del Alba y y ya por la tarde con el segundo encierro por el campo de sus fiestas patronales con reses de la ganadería de Los Galos. Los novillos de la divisa francesa realizaron el recorrido por el campo a toda velocidad, y llegaron a la entrada del casco urbano sin fuerzas, subiendo los dos primeros por la carretera de Matapozuelos, y mas tarde lo harían los dos restantes.
Foto: José Manuel Espeso,
Uno de los novillos arropado por los caballistas y los cabestros. y a continuación entraba el novillo que cerraba el encierro, que se había quedado rezagado, y que entró minutos mas tarde tras ser citado por los corredores, para ser conducido hasta la plaza de toros. De esta manera se daba por finalizado el encierro en el que los Zalduendos de la divisa francesa, fueron tan dulces que se dejaron su casta en el largo viaje desde Nimes, y no dieron el juego que tanto gusta al numeroso público que acude a presenciar los encierros de esta localidad vallisoletana.
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