La lluvia intermitente a lo largo de la mañana del domingo permitió la celebración de la tradicional procesión del Corpus cuellarana con el ceremonial de costumbre. No así la mayor parte de los actos programados en la feria de la juventud, que en la tarde del sábado tuvieron que ser suspendidos por la lluvia, y que en la jornada del domingo se trasladaron a las salas de la antigua iglesia de San Francisco. Sin embargo, la lluvia no impidió esta jornada que los jóvenes disfrutaran de los talleres y distintas actividades programadas para esta última de las jornadas del Cuéllar Joven.
En la jornada del Corpus no ha lucido el sol, como dicta el refranero popular, pero el brillo de la procesión lo han puesto los niños que celebran este año la primera comunión, que han ido extendiendo una alfombra de pétalos de flores al paso de la Custodia del Corpus, como se puede comprobar en la imagen tomada por Juan Carlos Llorente. La procesión ha salido desde la iglesia de San Miguel a los sones de la banda municipal de música y ha estado acompañada por una gran cantidad de fieles, que han seguido con el ceremonial habitual el paso de la procesión.
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