La Corporación y vecinos de Navas de Oro han celebrado esta jornada el Día del Peguero con un homenaje en memoria de Priscilo de Pablo, fallecido recientemente, y que es considerado como el último peguero, y heredero de una estirpe de artesanos dedicados al viejo oficio de la peguería.
El homenaje se ha realizado en el pinar del Sumidero donde el alcalde de Navas de Oro, Ladislao González, ha descubierto una placa en memoria de Priscilo de Pablo, y ha entregado a la familia un ramo de flores, y a continuación se ha preparado y encendido una peguera en recuerdo de esta tradición, a la que este peguero dedicó gran parte de su vida.
Este emotivo homenaje ha contado con la asistencia de muchos vecinos de la localidad, que han querido estar presentes en el homenaje al que es considerado el último de los pegueros de la localidad, un oficio hoy en día desaparecido, y que es el gentilicio con el que se conoce a los vecinos de Navas de Oro.
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