Un joven de 29 años de edad fue interceptado por la Guardia Civil cuando el 5 de marzo pasado circulaba a 218 kilómetros por hora por el kilómetro 86,200 de la autovía A-601, y fue detectado por un radar móvil de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. En el momento de la detención del vehículo, que fue realizada en coordinación con un equipo de servicio del Puesto de Seguridad Ciudadana de Nava de la Asunción, el conductor del vehículo iba bebiendo una lata de cerveza.
Tras ser sometido a la correspondiente prueba de la alcoholemia, no superaba la tasa permitida, pero no así en la prueba de drogas que arrojó resultado positivo, y tras el análisis de la muestra, se confirmó que el referido conductor conducía con presencia de THC y de cocaína en el organismo. Y se procedió a la instrucción de las correspondientes diligencias judiciales, por sendos delitos contra la seguridad vial, por conducir a una velocidad que superaba en mas de 80 km/hora la velocidad permitida en la autovía, así como por conducir bajo la influencia de drogas tóxicas, estupefacientes y sustancias psicotrópicas, según el artículo 379. 1 y 2 del Código Penal.
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