En Carbonero el Mayor se repitió casi el mismo guión en el segundo encierro por el campo, pero en esta ocasión de manera más desordenada, ya que dos de los novillos del hierro de Jesús González rompieron por delante en una primera entrada fallida, y tuvieron que ser reconducidos hasta ser metidos de nuevo en el recorrido urbano a toda velocidad.
Todos menos uno, que tuvo que ser anestesiado tras escaparse de la manada a la entrada de la población. Más tarde, en el encierro por las calles, los novillos del hierro de Los Palacios se hicieron los dueños de la calle ante la casi nula presencia de corredores, y así las cosas el entretenimiento estuvo en jugar a tapar la calle con una gran tela de color rojo, que los novillos saltaron en más de una ocasión.
Los vecinos de Carbonero disfrutan este martes 11 de septiembre de la última jornada de las fiestas del Bustar, con los tradicionales almuerzos y en las peñas, y en rincones tan tradicionales como Los Mellizos, que es el sitio de referencia del buen comer en Carbonero el Mayor.
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