Un recorrido por la Tierra de Pinares nos ha dejado estos días sorpresas muy agradables. Una de ellas, fue un nuevo concierto de Mayalde en nuestra comarca, en esta ocasión en la localidad de Fuentesauco de Fuentidueña, un dúo por el que no pasan los años y que sigue incansable cada verano recorriendo las carreteras de la región, en su carrera particular de difusión de la música tradicional.
De música folk, también hemos tenido oportunidad de disfrutar en otra localidad próxima, Chañe, que en sus fiestas programó un concierto de La Bazanca, otros que siguen dando guerra con su folk pan-ibérico. Y cruzamos de lado a lado la comarca, para ver en Aguilafuente, que los del Nuevo Mester de Juglaría demostraron, que siguen teniendo cuerda para rato.
Aquí en Cuéllar, el concierto del verano fue el de Medina Azahara, otros que persisten al paso del tiempo reivindicando el rock andaluz y la coral Voces de Castilla ofreció un magnífico recital dentro del ciclo de conciertos de las noches del patio de armas del castillo. Pero lo mejor de todo ha sido, sin duda alguna, un fantástico ciclo de cine de verano, en el barrio de El Salvador.
Y un poco mas allá, en pleno corazón de la tierra de Pinares, en Coca, estaba programado un concierto de Jose María Guzman, aquel que puso letra y música a aquella «Señora Azul» de Cánovas, Adolfo, Rodrigo y Guzmán, pero en su lugar, vimos a una excelente banda, la formada por el segoviano Jesús Parra, que ofreció un sensacional concierto con versiones de clásicos del pop, soul, rock y música negra que fue todo un gustazo. Buenos músicos, excelente sonido y una vocalista de lujo. En fin, como dicen en la radio, Radio 3, de vez en cuando un gustazo. Y vaya gustazo de concierto.
Así pasan las noches de verano en el Mar de Pinares. Mas cine y música. Por Favor.
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