Río Cega.
La plataforma «Cega el Río que nos Une», apoya el informe de Ecologistas en Acción en contra de la construcción del embalse de Lastras de Cuellar. Las dos organizaciones solicitan a la ministra para la Transición Ecológica que pare definitivamente el proyecto de este embalse que perjudica a la población y al patrimonio natural de la zona.
En dicho informe se pone de manifiesto el enorme impacto ambiental que produciría la construcción de dicho embalse, al anegar 700 hectáreas de terreno ocupado actualmente por masa forestal de gran valor ecológico en su mayor parte. Esta zona de bosque bien conservado, se perdería irreparablemente, afectando, además a la rica fauna que alberga.
Desde el punto de vista social, “la construcción del embalse produciría graves perjuicios a las poblaciones colindantes, a los que privaría de su actual fuente de suministro de agua potable, así como de unos ingresos periódicos considerables derivados de la explotación de los pinares”. Empleos de calidad y estables, como el sector resinero, en boga actualmente, se vería muy seriamente perjudicado por el embalse.
Tanto Ecologistas en Acción, como la Plataforma Ciudadana Cega, el Río que nos Une, coinciden en que los supuestos beneficios del proyecto del embalse son más que dudosos, y no superan ninguno de ellos el análisis más simple.
En realidad apuntan, todos son excusas para justificar la construcción de una obra inútil. Es un proyecto diseñado hace más de 100 años, para unos fines no vigentes, cuya ejecución produciría un enorme impacto ambiental y social, que actualmente carece de utilidad, y consideramos que se debería descartar su construcción de manera definitiva.
Por ello, reclaman al Ministerio para la Transición Ecológica y de Reto democrático, que desestime definitivamente el proyecto del embalse de Lastras de Cuellar, así como cualquier otro proyecto de embalse que afecte al río Cega.
1 agosto, 2020
El embalse de Lastras es una locura en todos los sentidos, al igual que la 3ª fase de la recarga del Carracillo, el cega no soporta más sustracciones de caudal, bastante tiene con las muchas que existen a lo largo de curso, unas legales o otras ilegales. Mayor control y eficiencia en el uso del agua, para evitar la sobreexplotación y contaminación de este bien común, donde se priorice el abastecimiento de los pueblos.