La presidenta de la Asociación de Resineros, Francisca Jurado, ha mantenido recientemente una reunión con el Consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta, en la que han transmitido a Suarez Quiñones, las principales reivindicaciones del sector. Empezando por el método de licitaciones abiertas para la adjudicación de las matas de resina, ya que consideran que ha abierto el camino a la especulación, y una reivindicación esencial para los resineros, la de vincular su actividad a los trabajos silvícolas durante el periodo en el que los resineros se encuentran en situación de desempleo, mediante la licitación de esos trabajos en la que se vea priorizada la figura de los resineros.
También recordaron al Consejero la situación de indefensión de los resineros ante los incendios, como el reciente en Nieva y Nava de la Asunción, donde no solo han perdido sus pinos, sino también el trabajo realizado, la miera ya obtenida , la inversión en materiales expuestos, el trabajo durante el resto del contrato e incluso el vehículo en el caso de uno de ellos. Y el problema que supone que en la actualidad no hay compañías aseguradoras que aseguren la actividad resinera en caso de incendios o las cuotas son enormes en relación a los ingresos por el aprovechamiento.
Por ello proponen la creación de ayudas a nivel autonómico y para compensar los costes de los seguros y las pérdidas del resinero. También la declaración de «zonas catastróficas», a través de una especie de Plataforma, en la que estarían la Consejería de Fomento, Entidades Locales afectadas, Asociación de Propietarios, Asociación Nacional de Resineros , y reconsiderar la figura del resinero, como lo que verdaderamente es, un titular de una explotación agraria, para que este pueda acceder a las mismas ayudas que los agricultores en casos de incendios y sequías.
Finalmente, expusieron los perjuicios que suponen los retrasos en la concesión de las licencias administrativas, y para evitarlo propusieron la concesión de licencias en Septiembre y las renovaciones automáticas para aprovechamientos en años posteriores al de licitación, con contratos plurianuales, tal como determina el Reglamento de Montes. Y además pusieron sobre la mesa los problemas fiscales que sufren los resineros, la necesidad de creación de un Registro de Explotaciones Forestales, su indefensión frente a los robos, y las extorsiones a la que se ven sometidos los trabajadores de la resina. En definitiva, una larga lista de demandas, algunas se puede calificar de históricas, para las que reclaman soluciones por parte de la Administración.
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