El verano ha comenzado este pasado fin de semana, en el capítulo festivo, con la suelta de dos toros de Sepúlveda en la noche de San Juan de Carbonero el Mayor, un festejo popular que se ha asentado en el calendario y en el que afortunadamente no ha habido ningún percance, después de la tragedia reciente que hemos vivido tras ser corneado mortalmente Juan Carlos Otero, «Gallo,» en los encierros de la localidad vallisoletana de La Parrilla.
Y no faltó en Carbonero el recordatorio al cortador de Navalmanzano, con la colocación de un ramo de claveles rojos en memoria de Gallo en la suelta de los toros de San Juan. Un encierro con dos toros muy serios del hierro de Sepúlveda, que con la presencia de muy pocos corredores se hicieron los dueños de la calle en la noche de San Juan, en la que no faltaron cortadores tan expertos como Jorge Gómez, Rafael González, Fran Herrero y Felipe de la Viuda entre otros. Además de muchos corredores de otros puntos de la provincia en las calles de Carbonero.
Las imágenes de Roberto Pascual nos dan buena muestra de la seriedad de las dos reses y de las peligrosas carreras delante de los de Sepúlveda en las estrechas calles de Carbonero el Mayor. Lo mas positivo es que no se ha producido ningún percance de consideración, y hay que desear que esa sea la tónica en los muchos festejos populares con toros que nos esperan a lo largo del verano. Que Dios reparta suerte.
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