El Consejero de Fomento, Suarez Quiñones, ha estado hábil a la hora de responder a Sarrión, en la sesión de control de las Cortes. Primero, defendiendo la actuación de la Junta, afirmando que «seguirá actuando como ha venido haciendo hasta ahora», en el control de la actividad de la planta de compostaje de Fuentepelayo. Y después señalando que la Administración ha actuado con «todo el rigor y la exhaustividad que marca la Ley», en las inspecciones y control de la actividad de la planta de compostaje de Fuentepelayo, una actividad que ha recordado tiene autorización, y en la que se han realizado 24 inspecciones, del 2008 al 2015, por parte de la Junta de Castilla y León.
Sarrión, que ha mostrado ante el plenario las fotografías de los vertidos de residuos en Fuentepelayo, ha insistido en su turno, en como es posible qué no hayan visto nada en las inspecciones, ¿donde miran se preguntaba el parlamentario regional de IU? Y ha sido en su segunda intervención, cuando el Consejero de Fomento, (ya sin posibilidad de réplica de Sarrión), ha explicado que «ante el malestar vecinal», la Junta realizó a finales de enero nuevas inspecciones, en las que se detectaron irregularidades en la situación de almacenamiento de la planta. «lo que ha llevado a fijar medidas cautelares y a ordenar corregir las irregularidades detectadas en el almacenamiento de la planta».
Suarez Quiñones, que se ha guardado su argumentario para este segundo turno que le reserva el reglamento de la Cámara, ha recordado que «la Junta ha estado reunida y se ha establecido un canal de comunicación con la Plataforma vecinal», y que por parte del SEPRONA se han formulado cuatro denuncias tras los vertidos detectados en fincas del entorno de Fuentepelayo. Y ha terminado su intervención con las siguientes palabras: » hemos hecho las actuaciones que corresponden, luego vendrán los expedientes y las sanciones. Estamos actuando al máximo de rigor, cumpliendo la Ley, y nos preocupa la salvaguarda de la salud de las personas».
La respuesta del Consejero no le ha gustado nada a Sarrión, que nada mas terminar el pleno, ha afirmado en declaraciones a cuellar7.com que Suarez Quiñones «se ha reído del pueblo de Fuentepelayo«, «evitado el debate en la sesión, y guardando sus argumentos para su segundo turno, en el que además no ha respondido a la pregunta sobre la medidas que se van a tomar de cara al futuro». Y evitando también, según Sarrión toda autocrítica, porque «no tienen ninguna defensa, defienden lo indefendible, que han actuado bien, cuando lo han hecho por el cabreo de la población». Sarrión lo ve así de claro: «ha tenido que montar un pollo la población de Fuentepelayo para que la Junta haga lo que tienen que hacer». Y se pregunta ¿ por qué han tardado 8 años en hacerlo».
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