Jesús Eloy García por el camino del Cid: de Cardeña a Silos
Los Ausines Cubillejo de Lara Covarrubias Lara de los Infantes Clunia De Cardeña a Silos Si vieseis venir gente, para ir con nosotros, Abad, Decidles que sigan el rastro y se pongan a andar Que en yermo o en poblado nos podrán alcanzar Soltaron las riendas, se pusieron a andar Cercano está el plazo para el reino dejar. Y así empiezo a dejarme llevar por estas tierras tan atractivas en una primavera lluviosa. Los pueblos son muy...
Desde el mar de Pinares: El romanticismo de los 8 apellidos catalanes
Con la curiosidad de un viajero globalizado he ido visitando pueblos de la Cataluña profunda, desde Vic, el epicentro del mundo independentista, a pequeños pueblos del Pirineo gerundense y del Ampurdán. Mi intención era hacer un recorrido casi neutro por esos pueblos que aparecen en tantas listas de internet, bautizados como los más bonitos, los más atractivos, históricos…o cualquier otro calificativo para que funcione la publicidad...
Desde el mar de Pinares: ¿Hablar bien de España?
Parece que hoy me he levantado con buen pie y es un día de para dejar de escuchar a todos los agoreros o resentidos con el mundo que inundan la prensa y las redes sociales. Es un día para echar otra mirada a esta tierra que llamamos España y hacer algo que no está de moda, ni bien visto, ni es “tremending topic”: hablar bien de este país. Ya sé que no interesa a nadie y que solo se leen con regusto los lamentos y los exabruptos de...
Desde el mar de Pinares: Algún día va a pasar algo…!
Cada vez se extiende más el estado del malestar. Cada semana son más las sectores de población que muestran su enfado. Y cada día son más los colectivos que sacan a la calle su rabia contra una situación desesperante y contra un gobierno que se mantiene mudo ante los desastres y conflictos que él mismo ha creado o que no ha sabido solventar. Desde comienzos de año los pensionistas, siempre tan callados, están en la calle hartos de que...
Desde el mar de Pinares: Extraña sociedad
La última vez que estuve fuera de nuestras fronteras, paseando por un parque normal, de una ciudad normal, veía parejas de treintañeros andando o jugando alegremente con sus dos hijos, como si siempre hubiera sido así desde el principio de los tiempos. Algo normal. En este pueblo donde yo vivo me sobran dedos de una mano para contar las parejas que conozco de treintañeros con dos hijos. Algunos tienen un hijo, la mayoría ninguno o ni...
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