Salida del Vía Crucis desde la iglesia de San Andrés.
El Cristo del Calvario, de la iglesia de Santa María de la Cuesta, salió este miércoles santo en el Vía Crucis tradicional para dar comienzo a las procesiones de la Semana santa cuellarana. Esta talla, recientemente restaurada, salió desde la iglesia de San Andrés, en el mas absoluto silencio, tan solo interrumpido por las oraciones en cada una de las estaciones del Vía Crucis, hasta su llegada a la iglesia de San Miguel de Cuéllar.
El castillo de fondo en una de las estaciones.
El Cristo del Calvario salió portado en hombros por cofrades del Nazareno, la Soledad, y la Cofradía del Cristo Yacente, y acompañados por estandartes y capuchones de las Cofradías del Calvario, La Dolorosa, nazarenos, soledanos y el Cristo Yacente, seguidos de un centenar de fieles, en la procesión mas íntima de cuantas se celebran en la semana santa cuellarana.
El vía Crucis por el arco de San Martín.
El Vía Crucis se prolongó por espacio de mas de una hora y acto seguido tenía lugar el traslado procesional del Cristo del Calvario, desde la iglesia de San Miguel hasta la capilla de Santo Tomé. Un traslado que se desarrolló en el mas absoluto silencio, tan solo roto por el sonido de los tambores por las estrechas calles del casco antiguo de Cuéllar.
El Cristo del Calvario camino de Santo Tomé.
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