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Los últimos Celtíberos: un viaje por la España del interior

Hay una parte de la España interior que está dejando de existir. Ha perdido población hasta límites extremos. Hay amplias zonas que están en torno a un habitante por kilómetro cuadrado. Eso es una densidad menor que las regiones más despobladas del planeta. Unos lo llaman la Laponia española, otros la España vacía. Hay quien lo compara con Mongolia o con zonas desérticas. Pero la realidad es aún peor porque, continúa despoblándose y nadie toma el problema en serio para buscar soluciones.

Estoy hablando de los territorios que se alzan a lomos del Sistema Ibérico. Son las tierras altas que se extienden desde La Rioja hasta las sierras valencianas, ocupando toda la provincia de Soria, el nordeste segoviano, buena parte de Guadalajara, de Cuenca, zonas Zaragoza, Castellón y la provincia de Teruel al completo. No existe nada igual en Europa. no encontraremos un espacio tan vacío y abandonado. Pero ¿cómo se ha llegado a esta situación?

Es la Celtiberia que lleva poblada con regularidad desde las migraciones centroeuropeas, los celtas, en los siglos VI y VII a C. Aquí se mantenían los poblados más vitales cuando llegaron los Romanos a la península y fueron los que más se resistieron a ser dominados. Uxama, Numancia o Tiermes son ejemplos de una vida y cultura que florecieron, adaptados a estos páramos que hoy vemos fríos y pelados.

En los últimos meses se han publicado unos cuantos libros sobre este tema que siempre me ha interesado, desde que recorrí la Sierra de Ayllón en bicicleta, cuando la tele aún era en blanco y negro. Ahora me he echado a la carretera, y al monte también, para lanzar una ojeada sobre estas tierras tan desamparadas, tan olvidadas de Dios y de los hombres, de los políticos, de los dueños del dinero y, por supuesto, olvidadas por los llamados nuevos emprendedores.

No es un recorrido por pueblos bonitos, ni históricos, ni turísticos, aunque hay unos cuantos. Son lugares diferentes. Pueblos que un día estuvieron llenos de vida, y que hoy los vemos casi vacíos, incluso a veces ya comidos por las zarzas. Son parte de nuestra historia, de la más reciente. Son la cara oscura del desarrollo urbano, industrial y turístico de los años 60 y 70. Unas zonas se enriquecieron y florecieron a costa de empobrecer y despoblar buena parte de España. Parece que todo estaba decidido y planificado de esta manera. Estos pueblos se vaciaron para llenar de mano de obra barata los cinturones industriales de Barcelona y del País Vasco. Luego los gobiernos democráticos tampoco hicieron nada por evitar este desastre demográfico y social. Ahora ya no hay remedios ni soluciones milagrosas.

  • Rello (Soria)

En nuestra Castilla y León llevamos unos cuantos años oyendo hablar a los políticos sobre planes para fijar población en los pueblos, sobre mujer y desarrollo rural, sobre mejoras de…Pero los datos estadísticos siguen siendo demoledores. Continuamos perdiendo población a nivel general y los núcleos pequeños continúan desapareciendo. Las soluciones políticas que se requieren son tareas a largo plazo y esos proyectos ya no tienen cabida en la agenda de nuestros políticos, cuya primera preocupación es ganar las siguientes Elecciones. Así es imposible que puedan plantearse seriamente la recuperación de estas áreas deprimidas.

Cada semana escribiré sobre una zona de estas provincias, que se han convertido en las más despobladas del mundo civilizado. Ya sé que no es un viaje seductor, ni tiene glamour. Ni siquiera me proporcionará fotos para subir al Facebook y que me digan “¡que guay!”,”¡cómo mola tío!” Es casi un viaje al pasado, a lugares que tienen el encanto de un tiempo ya perdido, pero que en parte se ha quedado enredado entre paredes abandonadas y calles desiertas. También es un viaje al futuro porque el proceso continúa y muchos de los pequeños pueblos que hoy vemos con un hálito de vida terminarán por vaciarse y recibir solamente habitantes durante algunas temporadas de vacaciones.

Es una mirada sobre la triste realidad de hoy, tratando de entender la sinrazón del despoblamiento y el abandono de una buena parte de nuestra España interior y tratando de escuchar a los “últimos celtíberos”, unos, melancólicos sobre un pasado que se fue, y otros, locos quijotes luchando contra los molinos de la gran ciudad y sus seducciones.

Autor: Jesús Eloy García Polo

Muévelo

1 Recado

  1. Enhorabuena Jesus por esta iniciativa, tambien es una parte de nuestra historia que se esta perdiendo, aquí no hay memoria histórica, será que no nos damos cuenta de lo que tenemos o teniamos tan cerca, y esos cinturones industriales que citas, llenos de castellanos, riojanos, aragoneses, manchegos, hoy son el vivo caldo de cultivo del independentismo, creo que esto seria digno de estudio, será que no miran nunca o no saben siquiera donde estan sus raices, sus valores, su idiosincrasia, sus origenes, en definitiva su tierra.

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