Plaza de palos de La Empalizada, de Montemayor de Pililla.
La Consejería de Cultura y Turismo, a través de la Dirección General de Patrimonio Cultural, ha iniciado el procedimiento para la declaración como Bien de Interés Cultural de carácter inmaterial de La Función de la Cruz y la tradicional plaza de toros de la Empalizada, de la localidad vallisoletana de Montemayor de Pililla, según aparece publicado en el Boletín Oficial de Castilla y León, de fecha 17 de febrero. Esta iniciativa para la declaración como BIC de la plaza de toros de La Empalizada ha sido promovida por parte de la Asociación Cultural Taurina La Empalizada.
Según refleja el expediente iniciado, la plaza de palos de esta localidad constituyen una singular manifestación cultural con orígenes en el siglo XVII, que se ha mantenido prácticamente inalterada hasta nuestros días, transmitiéndose de padres a hijos como un patrimonio vivo y seña de identidad de toda una comunidad. La Función comienza con el sorteo de los entablados, y con anterioridad se realiza la pedida de toros, fiesta tradicional en la que los jóvenes piden al alcalde los toros de ese año. En Montemayor de Pililla señala el documento. nos encontramos uno de los últimos restos del modelo de «toros de lugar», en el que la financiación corría a cargo de los vecinos, sin que intervinieran los órganos de gobierno más que esporádica y circunstancialmente.
Y la singularidad de su plaza de toros de La empalizada viene dada porque constituye un modelo singular de plaza de toros atalancada, que se monta y desmonta cada año con la madera de pino de las tierras del común. Su construcción artesanal y su ejecución históricamente solidaria por la propia comunidad, la configuran como un elemento patrimonial de especial relevancia. Basándose en esa singularidad, se determina su declaración como bien de interés cultural inmaterial.
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