Los encierros han sido excelentes, pero en el lado malo está el mal resultado de las capeas o probadillas en la plaza de toros. Y esa polémica se ha extendido en las redes sociales con opiniones de recortadores, como el cuellarano Adrián Pascual, que señalan que «nadie defiende desde las asociaciones y colectivos la suelta de reses de después del encierro en una plaza llena hasta la bandera».
Y no se trata de una queja aislada porque esas mismas críticas se han escuchado con pitidos en la plaza de toros y por parte de cortadores que vienen a las capeas desde distintos puntos de la región, Nava del Rey, Laguna y Tudela de Duero, Medina del Campo, etc, que se han tenido que ver las caras con «un ganado muy malo», que no ha servido para el lucimiento y el espectáculo.
Las críticas y el descontento se centran en la mala selección del ganado, con novillos de los cortes, que no han servido, y unas vacas con muy mala presentación. Y por ello reclaman «unas capeas de ley, a la altura de ese interés turístico internacional«, ya que señalan que público y corredores «no vienen solo a ver pasar el encierro, y les gusta ver y disfrutar de un buen espectáculo, con cortadores y toreros luciéndose con buenas reses en la plaza».
En esta edición el Jurado lo va a tener difícil a la hora de elegir el ganador del Trofeo al mejor cortador de las probadillas. Entre los mejores «dando la cara» ha estado el cortador de Mata de Cuéllar, Dani Muñoz.
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